Borja Montaño @BorjaMontano #CienciaEconomica
La opinión de Adam Smith sobre el
comercio exterior:
No
es el principal beneficio, y mucho menos el único que una nación saca del
comercio externo la introducción de plata y de oro: dos son los principales que
reciben de él las naciones que lo giran: sacar del país aquel sobrante del
producto de sus tierras, y de su trabajo que no puede hallar despacho dentro; y
traer en retorno lo que en la nación hace falta. Aquel comercio da valor a los
sobrantes cambiándolos por otras cosas que se necesitan para mayores
conveniencias. Por él, lo limitado del mercado doméstico no impide, como lo
haría, la división más oportuna del trabajo, y que esta pueda llevar a su
perfección las artes y las manufacturas, porque franqueando un mercado más
amplio para toda aquella porción de producto del trabajo que exceda del consumo
doméstico, anima a los operarios para perfeccionar y dar fomentos a las facultades
o fuerzas productivas, de suerte que tome un incremento considerable el
producto anual y, por consiguiente, la riqueza real y la prosperidad del país.
En hacer estos servicios a todas las naciones se ocupa continuamente el
comercio exterior, y todas ellas reciben de él notables beneficios (…)
Cuando
de un país extranjero se nos puede surtir de una mercadería a precio más cómodo
que al que nosotros podemos fabricarla, será mejor comprarla que hacerla, dando
por ella parte del producto de nuestra propia industria, y dejando a ella
emplearse en aquellos ramos en que saque ventaja al extranjero (…)
Es
cierto que por medio de los reglamentos restrictivos contra el extranjero puede
adquirirse y perfeccionarse una manufactura con mas prontitud que adoptando el
sistema contrario, y que al cabo de cierto tiempo se fabricaría dentro del
reino tan barata o más que en los extranjeros, pero aunque la industria
doméstica puede conducirse de este modo por un canal particular más pronto que
de la otra suerte, de modo ninguno se inferirá de aquí que la suma total de su
industria común o de sus rentas en general se haya de aumentar con reglamentos
semejantes. La industria general de la sociedad solo puede aumentarse a
proporción del aumento de su capital, y este incremento solo puede verificarse
con el ahorro gradual de sus rentas, o utilidades; así es que el efecto
inmediato de aquellos reglamentos es disminuir en aquel artículo las rentas de
la sociedad, y lo que disminuye estas rentas es imposible que aumente su capital
ni más pronta ni mas seguramente que si se hubiese dejado a la industria obrar
de su propio movimiento; luego mas ventajoso es a una sociedad dejar que los
capitales y la industria abracen los empleos que busquen de su propio acuerdo y
tendencia a impulsos de las circunstancias de los tiempos, que inclinarlos can
reglamentos y restricciones hacia cierto ramo particular.
SMITH, A.: Investigación
de la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones. Libro IV
(traducción de Josef Alonso Ortiz), Valladolid, 1794.
La ventaja comparativa, y la libertad del mercado las principales ideas de Adam Smith sin embargo en la actualidad estas ideas quedaron en eso simples ideas!...las distorciones del mercado a traves de los monopolios, oligopolios, protecciones de todo tipo hacen que estas ideas sean validas unicamente a los efectos academicos..!!
ResponderEliminar¿únicamente a los efectos académicos? Puede ser que tengas razón... Es muy interesante tu comentario....en general la participación de la gente enriquece esta página. Gracias por pasarte por aquí y si te interesa suscríbete a esta página
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